EL VALOR DE SER DIFERENTE EN EL ÁMBITO ORGANIZACIONAL
Además de ser capaz de hacer algo que otros valoran, que es útil, es fundamental realizarlo de manera especial, diferente, única. El trabajador o líder que aprende el valor de ser diferente, desarrolla habilidades como la creatividad, innovación y ser genuino; éstas a su vez generan una competitividad colaborativa y capacidad de pensar de manera contraintuitiva y no lineal. Estas competencias crean sinergias en la entidad que se identificará, del mismo modo como diferente con respecto a otras del mismo sector.
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